Normalmente la piel del rostro es la primera en manifestar los signos de la edad. Empiezan a aparecer arrugas y flacidez. Es entonces cuando al preguntarse qué hacer para evitarlo, se habla de las cremas con colágeno como primera medida.
Estas son un aliado perfecto para combatir estas situaciones, claro está, combinadas con un estilo de vida saludable. El colágeno es una proteína muy importante que, utilizándola adecuadamente, es clave para la firmeza cutánea: actúa como sostén de las fibras de la dermis y es la responsable de darles consistencia, resistencia y flexibilidad. El colágeno es la proteína más abundante de nuestro organismo y a medida que envejecemos, la capacidad de sintetizarlo disminuye. Se agota y empieza a notarse en el rostro y demás partes del cuerpo. Recuperarlo es posible con productos ricos en él.
Beneficios del colágeno en la piel
- Aporta firmeza mejorando la elasticidad de la piel y esto hace que se retrase su envejecimiento.
- Aumentar la producción de otras proteínas que ayudan a dar estructura a la piel, como la elastina y la fibrilina.
- Al ser un componente propio de nuestro organismo, suele no tener contraindicaciones (alergias o reacciones negativas)
- Aporta hidratación a la piel y refuerza los tejidos.
Es importante agregar que el simple hecho de usar crema con colágeno no será suficiente para mantener la piel firme y eliminar las arrugas. Esto, en el campo ideal, debe ir acompañado de un intensivo y correcto cuidado diario.